Vivo en una colmena, cual abeja anónima que trabaja para la comunidad. Sólo de vez en cuando, de noche, me asomo por mi celda hexagonal, y miro otras colmenas, exactamente iguales a la mía, pero tan diferentes... Cada celda de cada colmena es, aparentemente, similar a las otras celdas. Pero hay algunas en las que intuyes un hombre de negocios, o un fracasado, o un exhibicionista, o un hombre de negocios fracasado y exhibicionista.
Es fantástico comprobar lo diferentes que somos.

3 comentarios:

Clifor dijo...

El triunfo de la normalidad.
Esa foto bien podría hacerse desde mi ventana a 280 kilómetros de tu casa.

Es impresionante lo iguales que nos quieren hacer.

Siempre!

Morgana dijo...

Esperemos que siempre prevalezca la diferencia, es lo que nos hace únicos.

Anónimo dijo...

fran, me encanta la descripción que has realizado de la colmena de madrid. nadie puede dudar que eres un creativo, perdón, un excepcional creativo.
MARY